Limpiar el colchón es imprescindible si queremos mantenerlo en perfectas condiciones durante más tiempo. Cualquier colchón acumula diariamente infinidad de bacterias, polvo y ácaros. Limpiarlo correctamente es también una cuestión de salud.
Limpiar el colchón: ¿por dónde empiezo?
Aunque no los veamos, los colchones acumulan millones de ácaros, pequeñísimos organismos que se alimentan de piel muerta. Estos diminutos bichos son los causantes de muchas alergias, problemas cutáneos y respiratorios.
Lo primero que debes hacer es ventilar la habitación diariamente durante al menos 15 minutos, procurando que el colchón se airee. Además, lo ideal es que este no tenga más de 10 años, porque se deforma e impide que durmamos bien.
Una vez que hayas elegido o cambiado tu colchón, veamos cómo cuidarlo.
¿Cada cuánto tiempo debo limpiarlo?
Lo más recomendable es limpiar el colchón cada seis meses, coincidiendo con el cambio de temporada. Aprovecha también este momento para darle la vuelta. Además, la mayoría de colchones tienen un lado de verano y otro de invierno, por lo que es el momento ideal para ponerlo a punto.
¿Cómo limpio y desinfecto?
El primer paso consiste en tratar las manchas más visibles. Te contamos cómo hacerlo:
- Vierte medio litro de agua fría y tres cucharadas de detergente líquido en un cubo y mézclalo hasta que haga espuma.
- En la zona donde se encuentre la mancha, y con ayuda de una esponja o un cepillo, esparce la espuma. Utilizar la espuma hará que no se humedezca en exceso el colchón.
- Frota con movimientos circulares hasta que veas que la mancha va desapareciendo.
- Con un trapo seco y limpio, retírala. Si queda un poco húmedo, usa un secador de pelo en la zona para que seque más rápidamente.
Una vez que hemos tratado las manchas y el colchón está seco, procedemos a desinfectarlo. Lo haremos de la siguiente manera:
- Esparce bicarbonato de sodio por toda la superficie del colchón.
- Rellena un atomizador con agua oxigenada o vinagre. Pulveriza de manera uniforme por todo el colchón. Deja que repose y actúe durante unos 45 minutos.
- Pasado este tiempo, rocía de nuevo con el atomizador las zonas que estén peor. Lo que haremos será frotar con una esponja limpia. Hay que hacerlo con garbo por toda la superficie. Verás entonces que el bicarbonato se pone marrón. Esto significa que está arrancando la suciedad.
- Por último, aspira los restos de bicarbonato. Tras este proceso, lo ideal sería dejarlo una hora al sol. Si esto no es posible, puedes utilizar otra vez el secador de pelo para eliminar la humedad.
Como ves, limpiar el colchón no es difícil ni costoso. Elegir un colchón de calidad se traduce en beneficios en tu descanso, un buen cuidado de tu espalda y mejoras en tu salud. Y si además aplicas estos trucos de limpieza, harás que tu colchón se mantenga en mejor estado por más tiempo.
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